En Gestión de Proyectos Master solemos dar consejos de manera positiva, centrándonos en aquello que es recomendable hacer y explicando cómo y por qué hacerlo. Este artículo cambiamos dicho punto de vista habitual, puesto que en esta ocasión repasamos las acciones más habituales que transmiten que no nos tomamos en serio a los componentes de nuestro equipo.
Debemos observar que muchas de ellas suelen ser la consecuencia de una gran carga de trabajo y responsabilidad y no siempre se pueden evitar, pero si queremos mantener a nuestro equipo motivado deberemos eludirlas en la medida de lo posible.
1 – Llegar tarde a las reuniones
Muchas veces tenemos maratones de reuniones, enlazando unas con otras. Si una de ellas se alarga más de lo planeado, entonces inevitablemente llegaremos tarde a la siguiente reunión planificada. En este caso, las personas de nuestro equipo nos estarán esperando cuando lleguemos. Esto crea la sensación de que el jefe de proyectos valora más su tiempo que el de los demás, puesto que no le importa hacer esperar a su equipo. Si se repite mucho esta situación, nos arriesgamos además de a desmotivar al equipo a crear una dinámica en la que lo normal es llegar tarde a las reuniones, lo que a la larga hará perder mucho tiempo a todos los integrantes del equipo.
2 – Interrumpirles cuando hablan
Cuando no dejamos acabar de hablar a nuestros compañeros transmitimos a nuestro equipo que no nos importan lo suficiente sus opiniones, o que consideramos que tenemos más derecho a hablar que el resto. De esta manera podemos conseguir que nuestros compañeros no se involucren adecuadamente en el proyecto, algo muy negativo a largo plazo.
3 – Atender llamadas en mitad de una conversación
Muy relacionada con la actitud anterior es la de atender llamadas telefónicas en mitad de una conversación, puesto que sin ni siquiera saber de qué se trata la llamada decides que es más importante atenderla inmediatamente haciendo esperar a la persona con la que estás hablando, que finalizar la primero conversación. En este momento nuestro interlocutor no se sentirá en absoluto tomado en serio.
4 – No ceder la responsabilidad
Manteniendo toda la responsabilidad sobre el proyecto, sus pedidos y los diferentes paquetes de trabajo, indicamos que no confiamos en el resto de integrantes de nuestro equipo. Esto implica que no los consideramos suficientemente capaces, con lo cual para ellos será extremadamente sencillo cumplir con nuestras expectativas.
5 – Controlar cada paso
Esta actitud es similar al punto anterior. Aunque cedemos la responsabilidad, lo hacemos sin confiar en nuestro equipo, por lo que hemos de controlar cada paso que dan sus integrantes. De igual manera que no ceder la responsabilidad, el controlar cada paso significa que nuestras expectativas son muy bajas y por tanto muy sencillas de cumplir, lo que tenderá a desmotivar a nuestro equipo.
6 – No interesarte por los integrantes de tu equipo
La falta de interés, tanto personal como por el trabajo de los integrantes de nuestro equipo, transmite que no los consideramos importantes, o bien que los consideramos de menor rango que nosotros.
7 – No pronunciar correctamente sus nombres
Similar al punto anterior y especialmente importante en proyectos internacionales, el interés por los integrantes de tu equipo comienza por aprender y pronunciar correctamente sus nombres. Aunque parezca mentira, he conocido a muchas personas que ni siquiera se toman la molestia de aprender los nombres de los integrantes de su equipo. Esta actitud evidentemente implica que la persona en cuestión no es tomada en serio y dificulta la integración en un equipo de trabajo.
8 – Requerir que hagan algo inmediatamente
La mejor manera de indicar que no consideras importante el trabajo de una persona es requerir que realice inmediatamente una nueva tarea. Esta petición implica que, sin saber en lo que está trabajando actualmente, tu opinión es que no puede ser más importante que esta nueva tarea. En efecto, una actitud infalible para transmitir que no tomas en serio el trabajo de esa persona.
Conclusión
Te recomendamos que reflexiones sobre los comportamientos anteriores y los evites a toda costa para mantener alta la motivación de los integrantes de tu equipo de trabajo. Además, según nuestra experiencia, si tu equipo de trabajo se siente tomado en serio entonces te tomará mucho más en serio como Jefe de Proyecto.
Buena lista. Puntos muy concretos en los que poder fijarse. Seguro que todos «flaqueamos» en alguno de ellos.